La mujer expresa, el hombre reprime

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Durante miles de años, la creencia del ser humano decía que el hombre vivía menos años que la mujer porque en su historia genética estaba grabado aquellos momentos pre-históricos en que él salía a trabajar, o a conseguir el alimento para su propia subsistencia y luego, la de los suyos, siendo que la mujer en la cueva estaba menos expuesta a los avatares de los peligros de la época. Lo cierto es que el hombre vive menos porque expresa menos, reprime más sus emociones desde pequeño. El descabellado "Los hombres no lloran" "No seas maricón" que llega a nuestros oídos aún hoy, solo sirve para crear mas frustración, ansiedad, ira, intolerancia, duda, inestabilidad y resentimiento. La mujer experimenta éstos estados, pero tiene menos problema en expresarlos, obviamente, no de manera sana puesto que también se desestabiliza, pero la mujer genera menos infartos dado que su corazón es flexible, y el del hombre se endurece a costa de reprimir. Así resulta que solo se rompe un corazón duro, no uno flexible. El hombre debe dejar de hacerse el duro y conectarse con sus pensamientos y sentimientos, tanto los luminosos como los oscuros y expresarlos sanamente, la mujer también, pero el tema, aquí, es el hombre. La biología hace lo suyo, pero si no creamos salud, la biología responde a lo que le doy; si doy miedo a cada paso, responde a ello, si doy amor, responde a ello... El hombre elije, la vida actúa respondiendo con su propia biología (la de él).